Los mangas de lucha explicados en sencillas frases II

"100 razones por las cuales la cerveza es mejor que la mujer", machista anónimo.
Las mujeres tienen un papel muy importante en los mangas de lucha. Y cuando digo "un" papel, me refiero a eso, a sólo uno. Amigas con posible relación romántica en algún momento que no haya que luchar (que será nunca) o, en algunos raros casos, novias. En ocasiones puede que hasta luchan como sus compañeros masculinos, pero no nos engañemos, están condenadas a tener el síndrome de "mario-rescata-princesa".
Ejemplos: Dragon Ball, Naruto (1ª parte), Bleach, Hajime No Ippo.

"Odiad a vuestros enemigos, como si un día debierais amarlos", Pedro Calderón de la Barca.
Este es un síndrome característico de todo manga de lucha en sus inicios. Los enemigos más difíciles, más odiados, pasan tras ser derrotados y la aparición del nuevo super-enemigo a ser aliados y más adelante a amigos de toda la vida. Qué te intento matar mientras dormías? Estuvo a punto de destruir la Tierra, robarte el coche o ligarte a tu chica especial (ver punto anterior)? Pelillos a la mar, eso no es nada!
Ejemplos: Dragon Ball, Rurouni Kenshin, Yuyu Hakusho, Hystory Strongest Disciple Kenichi.

¿Cuántos de estos personajes eran malos en un principio?

"Mira hacía atrás y ríete de los peligros pasados", Walter Scott.
Los enemigos son terribles, malvados, poderosos y muy muy crueles. Y su jefe, el final boss, es áun peor. Pero el próximo final boss se podrá cargar a este con el dedo meñique o con un bostezo de aburrimiento, es ley de vida. Es la teoría de la compra de ordenador pero llevada al infinito, el ordenador que te compraste ayer no sólo ya se ha quedado viejo si no que ya no lo quieren ni los vagabundos!
Ejemplos: D-GrayMan, Dragon Ball, Dragon Quest Dai.